Los 10 peligros de la tecnología sanitaria
ABC.es
La tecnología sanitaria se encuentra al servicio del paciente. Cada vez hay más aparatos, programas o dispositivos que facilitan la vida de los pacientes, además de salvar vidas, anticipar el diagnóstico de enfermedades o mejorar la calidad de vida de las personas. Sin embargo, como todo, existen algunos riesgos asociados a su uso, relacionados más bien con un «mal uso» de dicha tecnología que con los propios dispositivos. Cada año el Instituto ECRI . una organización independiente y sin ánimo de lucro que investiga los riesgo de la tecnología de la salud con el fin de mejorar la atención sanitaria al paciente, elabora un lista de los 10 riesgos más importantes hospitalarios a los que están sometidos los pacientes.
Sus autores señalan que este documento sirve advertir sobre algunos de los riesgos que conllevan las tecnologías sanitarias, que los tienen, pero sobre todo para crear conciencia entre los profesionales sanitarios, y también en los usuarios de dichos servicios, de los peligros potenciales asociados con el uso de dispositivos médicos con el objetivo final de minimizar el riesgo de eventos adversos relacionados con el uso de esta tecnología.
Los expertos señalan en su informe a los riesgos asociados a las alarmas de los dispositivos médicos como el principal elemento que se debe controlar. Aunque reconocen que son fundamentales, a veces al ser tan numerosos, puede ser elementos de distracción para el profesional, además de que algunos son clínicamente insignificantes. En ocasiones hacen que los profesionales sanitarios llevan a cabo acciones poco seguras, como bajar el volumen de la alarma hasta niveles inaudibles o incluso desactivarlas, causando un potencial peligro para el paciente.
En el informe de este año se incluyen además los riesgos relacionados con la exposición a la radiación en los quirófanos híbridos y las complicaciones derivadas de la insuficiente formación en el uso de la cirugía robótica. La lista también incluye dos peligros para los pacientes pediátricos: las dosis de radiación tomografía computerizadas y el uso de tecnologías diseñadas para los adultos en niños.
«La seguridad de las tecnologías sanitarias no puede obviarse» señala James P. Keller, del Instituto ECRI. «Nuestros datos muestran que existen graves problemas de seguridad que deben ser abordados».